miércoles, 2 de noviembre de 2011

Suerte

El ser humano suele atribuir situaciones fuera de su control a la suerte. Algo favorable que no se esperaba es buena suerte. Algo desfavorable, mala suerte. Algunas personas confunden el azar con la suerte y por eso quien gana en juegos de azar tiene buena suerte y quien pierde, mala.

El Bridge suele ser acusado injustamente de ser un juego de azar. Sin embargo, a pesar de ser un juego de información imperfecta (las cartas de tres jugadores durante la subasta y de dos durante el carteo están escondidas) también es un juego de información completa (en todas las manos las 52 cartas están en juego y sabemos que puede hacer nuestro compañero o nuestros contrincantes dentro de ciertos límites) y es necesaria cierta habilidad para manejar bien las cartas. Eso sin contar con el hecho de que la comunicación entre los compañeros está codificada de una manera 'científica' y hay que aprender ese código. Finalmente, el bridge en torneos se juega por el sistema 'duplicado' lo que significa que muchas parejas (en ocasiones todas) juegan las mismas manos y gana quien mejor las maneje, dejando al azar muy relegado y convirtiendo al Bridge en un juego de la mente.

Aún así hay jugadores de Bridge que se quejan de la mala suerte. Pero en cualquier deporte pasaría: en ajedrez podríamos jugar nuestra primera partida contra el mejor jugador del torneo (lo cuál muchas veces puede significar perder); o tal vez escogemos una apertura en la que nuestro contrincante es especialista. O un equipo de cualquier deporte pierde a su mejor jugador por estar indispuesto antes de un partido importante. Hay un árbitro que pareciera estar siempre en nuestra contra. Nacimos en un país ubicado en una zona deportiva que dificulta nuestra entrada a los mundiales. Todo esto se puede considerar mala suerte.

Tomemos este caso en partícular:



Esta subasta nos muestra a un Norte excesivamente optimista. Sin embargo, Sur consigue los triunfos 2-2 y la doble finesse en trébol funciona lo cuál significa que hay 11 bazas disponibles. Al terminar el carteo Sur le reclama a Norte por llegar a 4 con esa mano y Norte se limita a responder 'Bueno pero, ¿Tú no abriste la mano?'

Este es de más reciente data:



Norte, quién ya había apoyado en diamante, preguntó Key Cards en dicho palo. Sur pensó que su compañer@  preguntaba en trébol. Resultado: se dió un Key Card extra que llevó a la pareja a un Grand Slam a una finesse. La salida fue de triunfo (ya se imaginan a dónde para esto, ¿Verdad?), los triunfos estaban 2-3 y el K bajo finesse. Luego de destriunfar Sur comienza a jugar los tréboles, JT están doubleton (hora de tenderse, ¿Verdad?). Sur parece preocupad@, triunfa un trébol en la mesa, descarta dos tréboles (ganadores) sobre AK de corazón, cobra el As de espadas y juega la finesse de espada, la cuál se da. Eso no se lo imaginaban, ¿Verdad?

Este tipo de situaciones ocurren en cualquier torneo de bridge a cualquier nivel (aunque mientras mayor sea el nivel menos sucederán): un jugador se confunde y llega a un contrato 'anormal' que se cumple o un jugador toma una línea de carteo (o defensa) inferior y esta funciona. Cuándo somos de la pareja contraría y nos pasa esto nos quejamos de nuestra mala suerte.

Y sí, definitivamente se podría considerar así en algunas ocasiones, lo que no se puede o no se debe hacer es quedarse estancado en ese pensamiento. Aunque suene New Age, el pensar negativamente atrae más resultados negativos y más preocupación y así  terminamos perdiendo por causas ajenas al Bridge.

Por ejemplo, en la primera mano en otras mesas Norte podría invitar a Game con su mano de 4 cartas de fit , singleton, palo quinto bueno y 3 ases: Sur podría aceptar esa invitación. En la segunda mano el K de diamante (o mejor aún la Q de espada) podría estar mal puesto y los contrarios se irían down por jugar en el nivel errado. Eso también nos ha pasado y continuará pasando: la buena y la mala suerte siempre terminan equilibrándose pero es la actitud la que debe permanecer siempre en positivo.

martes, 4 de octubre de 2011

Dormirse en la mesa

Muchas veces ocurre en la mesa de bridge que algún jugador (a veces dos, a veces tres, a veces cuatro...) se duerme (n) en la mesa. Declaraciones o jugadas disparatadas y sin lógica suelen ocurrir en esas ocasiones.Para muestra veamos esta mano:



En este punto lo peor ya ha pasado: el declarante adivinó el diamante. Sólo falta algo por hacer en esta mano, ¿Verdad? Sacar los triunfos. Sur, cansado luego del trabajo que significó adivinar que jugar a la segunda baza, jugó la K de Espadas de frente. Resultado: 1 down. Este tenía AT9 de Espadas y ganó dos bazas en el palo.

¿Qué debe hacer el declarante en esta mano? Entrar al muerto para sacar los triunfos! Jugando los triunfos de frente se pierde siempre que Este tenga As singleton o tercero de triunfo y sólo se gana cuando los triunfos están 2-2 (caso en el cual cualquiera de las dos formas es ganadora). Ese problema se soluciona con dos 'expasses' simples. Es un poco más interesante y 'avanzado' el preguntarnos, ¿Cómo se entra al muerto para hacer estos expasses a triunfo?

Hay MUCHAS entradas disponibles por lo que conviene jugar la más segura: cortando corazones en la mesa.

Parece extraño pero primero veamos las entradas en trébol. Hay dos, pequeño trébol al 10 (o la J o la Q) y K de trébol al As. Entrar de esta manera puede ser peligroso, ¿Qué pasa si un jugador tiene singleton o void de trébol? Luego tenemos la entrada cortando un diamante; nos deshacemos de una perdedora en el camino pero, ¿Y si gana Este con su As singleton de triunfo y juega una cuarta ronda de diamante? Si Oesta tenía JT9 de triunfo se le afirmó uno y además también puede suceder que los triunfos estén 2-2, gane Oeste el As pero nuevamente devuelva una cuarta ronda de diamante que su compañero triunfará y tendremós que sobretriunfar con el honor de Espada que nos queda, dejando firme un triunfo en la mano de los oponentes. Finalmente el Corazón: de este palo quedan 7 cartas por fuera, no hay indicaciones de que alguien pueda estar corto y además, cortar ganadoras nos hace ver muy inteligentes (si cumplimos el contrato...). Así que cortando uno de los dos corazones firmes en el muerto y luego un diamante y jugando triunfos hacia nuestra KQ perdemos sólo una baza en espada.